Este cepillo en forma de abanico es la elección correcta para aplicar finas capas de esmalte sobre tus piezas de cerámica. Diluya el glaseado con agua y use el cepillo abanico para recoger una pequeña cantidad. Aplica en capas finas sobre tu trabajo hasta conseguir el acabado deseado.
También puedes diluir significativamente el esmalte y utilizar la brocha abanico para aplicarlo. Deje que el esmalte se acumule en los huecos de sus piezas de cerámica para darle un aspecto "lavado" o "antiguo".
Tamaño del pincel #1